Los ayuntamientos denuncian que no se cumplen los servicios mínimos de la huelga de basuras

Los ayuntamientos de Santa Eulària, Sant Josep y Sant Joan expresaron ayer su preocupación por la falta de cumplimiento de los servicios mínimos decretados con motivo de la huelga de recogida de residuos y limpieza viaria en las empresas concesionarias en sus respectivos municipios: Herbusa y la UTE Es Vedrà.

En un comunicado conjunto, las tres administraciones locales abogaron por el respeto al derecho a la huelga y a la autonomía en defensa de sus intereses de las partes que participan en esta negociación colectiva. Dicho esto, subrayaron que es «imprescindible que se cumpla con los servicios mínimos para evitar los riesgos que supone para la salud pública la acumulación de restos en la vía pública a altas temperaturas» durante varios días.

«La posibilidad de aumento de plagas o patógenos en los puntos donde no se lleva a cabo la recogida es un riesgo evidente y puede tener efectos muy perniciosos en la salud de las personas», alertaron los tres consistorios.

También quisieron recalcar lo «preocupante» que resulta «el impacto que esta situación puede tener en los negocios locales y en la imagen general de la isla de Ibiza».

Recogida limitada

Por su parte, la empresa Herbusa también denunció el incumplimiento de los servicios mínimos decretados por los ayuntamientos. Aseguró que en la madrugada del domingo los trabajadores volvieron «a bloquear la salida de los camiones hasta que ha aparecido la policía y entonces han salido».

Señalaron que esta actitud ya supone un incumplimiento de este servicio básico, dado que «se retrasa deliberadamente la salida de los camiones con diversas argucias».

Además, señalaron que «los camiones que salen no recogen apenas residuos, en unos casos por iniciativa de los conductores y en otros casos por las presiones que reciben».

Desde CCOO defendieron que la concentración de los trabajadores en la puerta del garaje dejó pasar a todos los vehículos si cumplían con las condiciones de seguridad laboral.

En la segunda jornada de huelga salieron a hacer la ruta de recogida de residuos los doce vehículos estipulados en los servicios mínimos, «aunque alguno tuvo que volver porque se encendieron los avisos de incidencia», detalló el director general de Construcciones y Servicios de CCOO en Balears, Miguel Pardo.

Destacaron el esfuerzo de la empresa para poner a punto todos los camiones de basuras, tras la situación del primer día, cuando sólo cuatro salieron del garaje porque los trabajadores se negaron a conducir aquellos que tenían señales de advertencia encendidas en sus respectivos cuadros de mandos.

Los sindicatos hicieron mucho hincapié en el esfuerzo que se estaba haciendo para que los trabajadores cumplieran con los servicios mínimos estipulados.

No obstante, criticaron que no se estuviera notificando personalmente a los trabajadores las tareas que debían cumplir y que es el propio sindicato CCOO el que está dando las indicaciones a los trabajadores sobre qué zonas son prioritarias en la limpieza.

También indicaron que algunos camiones salían sólo con un peón, mientras que desde el sindicato siempre se ha pedido que sean dos personas las que ayuden en la carga de los residuos. Los pliegos de condiciones no obligan en algunos municipios a que coincidan dos peones, pero señalaron que esta medida da más seguridad a los trabajadores y agiliza la tarea.

Dos días sin contactos

Pardo también mostró su sorpresa al no haber recibido ninguna llamada por parte de las empresas para retomar las negociaciones. A media tarde de ayer no se habían producido contactos. «Nos sorprende que ni las empresas nos haya contactado ni los ayuntamientos nos sienten en una mesa a negociar», manifestó el representante de CCOO.

Recordó que «la basura no se va a ir sola de las calles por muchos servicios mínimos que se pongan» e insistió en la necesidad de retomar el diálogo y en que la iniciativa debe ser de Herbusa o la UTE Es Vedrá o, en todo caso, de las administraciones locales como contratistas del servicio.

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Recordó que en anteriores negociaciones en Mallorca, las administraciones les habían «obligado» a sentarse «durante horas hasta que se alcanzaba un acuerdo». Po ello, lamentó la falta de celo de los tres ayuntamientos ibicencos por dar impulso al diálogo entre patronal y trabajadores.

«Este conflicto acabará saliendo en toda la prensa nacional y europea si no se corta ya, por la imagen que tiene Ibiza», advirtió Pardo, que insistió en la necesidad de retomar el diálogo.

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