Educación

Vera rechaza el nuevo modelo de Selectividad aprobado por Madrid

El conseller de Educación critica que no se unifique la prueba a nivel estatal y pide igualar la estructura o las fechas de los exámenes

El conseller de Educación, Antoni Vera, expresó ayer su rechazo al nuevo modelo de Selectividad aprobado el martes por el Consejo de Ministros, que se empezará a aplicar el próximo curso.

Criticó que el Ministerio de Educación no apueste por hacer una prueba única para todo el país y, en línea con el argumentario del PP nacional y aunque sí se introducen varias modificaciones de cierta importancia (como que ya no será posible elegir entre dos modelos de examen), el conseller consideró que en definitiva el Gobierno no cambia nada más allá del nombre: ahora las pruebas pasarán a ser PAU en vez de PBAU. «Le cambian el nombre y la han maquillado, y lo que no han hecho es que sea más consensuado y homogéneo en el territorio», consideró.

Vera lamentó asimismo que el Consejo de Ministros haya aprobado el real decreto «de forma unilateral y sin escuchar a las comunidades autónomas» y sin una conferencia sectorial previa, pese a que la ministra Alegría precisamente destacó el martes que el modelo se ha diseñado tras «más de 200 reuniones» con universidades, autonomías, familias y alumnos. El PP participó en el proceso de elaboración del futuro modelo hasta que la dirección nacional decidió dejar de colaborar y anunció que en las comunidades en las que gobiernan trabajarían por aplicar la misma Selectividad, razonando que es la opción lógica dado que España es un distrito universitario único.

Vera admitió que la parte curricular es imposible que sea igual en todas las comunidades, pero sí defendió que se puede homogeneizar la estructura, las fechas de la prueba y los criterios de evaluación y que eso es lo que van a coordinar las comunidades dirigidas por el PP, invitando a todas las autonomías a sumarse.

Cabe señalar que, según explicó a este diario Joan Antoni Mesquida, responsable de organizar la Selectividad en la UIB, lo cierto es que las propias universidades en el seno de la Conferencia de Rectores (CRUE) hace años que trabajan para armonizar al máximo las pruebas (por ejemplo, en cuanto a la penalización por faltas de ortografía en las asignaturas lingüísticas). En este sentido, Mesquida ya adelantó que probablemente el año que viene todas las comunidades harán las pruebas en las mismas fechas.

Vera indicó que la propuesta de su partido no persigue unas pruebas «ni más difícil, ni más fácil, sino que sean justas para todos los alumnos». Consideró que lo aprobado el martes en el Consejo de Ministros sin haber pasado antes por conferencia sectorial «complica todo todavía más a universidades, profesores y alumnos» y genera incertidumbre.