Las salas 1 y 2 del Museo Patio Herreriano de Valladolid de arte contemporáneo acogen desde hoy la exposición del proyecto completo 'Donde nada ocurre', una profunda reflexión de la artista ibicenca Irene de Andrés sobre los paraísos impostados -y perdidos- que se articularon en torno a cinco famosas discotecas de la isla, ya convertidas en historia y en polvo. Es la primera vez que De Andrés expone 'Donde nada ocurre' al completo, «uno de los proyectos más interesantes realizados en España en los últimos años», según informa el museo. Hasta ahora solo había podido exponer partes del proyecto, como la dedicada a Toro Mar e Idea en el Casal Solleric de Palma.
La exposición gira en torno a cinco míticas discotecas ibicencas, que impulsaron la música electrónica y la cultura de club desde los años sesenta y setenta, y que ya solo perviven en la memoria y en las hemerotecas: Idea, Festival Club, Heaven, Glory's y Toro Mar. La investigación de De Andrés documenta el auge de estos templos de la noche convertidos en la meca de la diversión para infinidad de personas procedentes de todo el mundo, y recoge su decadencia, su conversión en ruinas, y su desaparición física.
Irene de Andrés ha dedicado un vídeo a cada discoteca, que transmiten el desasosiego que provoca el paso del tiempo, la provisionalidad de la juventud, el desconcierto de constatar cómo lo que hoy parece eterno e inamovible (esas salas-iglesias con sus millones de fieles) se esfuma. Además, la exposición incluye un importante conjunto de fotografías, esculturas, maquetas y diverso material documental que halló y rescató durante sus investigaciones, como vinilos rotos de Glory's, ahora enmarcados y recuperados para preservar la memoria en un museo.
Una pieza fundamental de 'Donde nada ocurre' es un Diario de Ibiza (editado con la colaboración de este periódico) que recoge noticias reales de la trayectoria de estos establecimientos que ya forman parte del mito de Ibiza , y que sirven de motor de la reflexión de la artista en torno a la relación entre el turismo y la cultura popular.
Las primeras pistas de baile
Las primeras raves y pistas de baile, espectáculos taurinos para turistas, conciertos en directo, miles de jóvenes entregados, en comunión con su ídolo-dj... El vídeo del Festival Club, del que ya solo quedan las ruinas del anfiteatro tomadas por la vegetación en una montaña en Sant Josep, es una fantasmagórica sesión del disc-jockey más idolatrado de aquellos años de nacimiento de la música electrónica en Eivissa, Alfredo Fiorito, que aparece en plena sesión, absorto en sus viejos platos de vinilos, completamente solo, sin el público que abarrotaba las pistas, donde nada ya hace imaginar ese pasado luminoso de disfrute y despreocupación. La producción de Festival Club ganó el Premio Generaciones 2013 Fundación Monte Madrid.
Nano Vergel, dj de Glory's, aparece en otro vídeo recordando aquellas noches épicas ibicencas mientras recorre la discoteca abandonada, un año antes de que fuera demolida. Los templos del ocio y el placer tornados en lugares en ruinas o desaparecidos. Donde nada ocurre ya; de ahí el título del proyecto.
Irene de Andrés trabaja en medios muy diversos: fotografías, vídeos, esculturas y grabados forman parte habitualmente de sus proyectos. La artista ha centrado gran parte de su obra en el turismo y sus consecuencias, marcada por su isla natal; el turismo como la colonización de nuestros tiempos. De Andrés busca el origen del mito de Eivissa, y presenta trabajos que «pertenecen al 'glorioso' imaginario colectivo de un pasado no muy lejano y, a la vez, reflejan la a menudo sombría realidad de un presente que poco tiene que ver con aquel paraíso hedonista desde el que se fraguó la imagen de la isla», agrega el museo en la nota de sala.
«El conjunto de la obra que presenta Irene de Andrés revela un espíritu arqueológico que no elude una crítica hacia algunas de las pautas más visibles del deterioro de nuestros paisajes urbano y natural, fruto, en muchos casos de la sempiterna especulación y de las dudosas prácticas de quienes perversamente instrumentalizaron el turismo como principal modelo de negocio en la isla», prosigue la nota editada por el centro.
La artista está disfrutando de una de las residencias de producción de Matadero Madrid durante este año. En 2018 le concedieron otra residencia en Hangar Lisboa con el apoyo de Illenc. Entre otras distinciones, ha recibido el Premio Ciutat de Palma 2015 y el Premio Generaciones 2013.
El museo inaugura mañana otras dos muestras, además de la de De Andrés: 'Asir, de la pintora Mercedes Mangrané, y 'Zarza Corazón', de la escultora, poeta y performer Elena Aitzkoa. El comisario de las tres exposiciones es el director del Museo Patio Herreriano, Javier Hontoria.
'Donde nada ocurre' permanecerá expuesta hasta el 6 de noviembre.
