La UD Ibiza ha logrado esta tarde la clasificación para los dieciseisavos de final de la Copa del Rey después de derrotar en los penaltis al Albacete Balompié en un encuentro que finalizó con empate a uno. El delantero Diego Mendoza, que entró en el último minuto de la prórroga para el lanzamiento de penaltis, ha conseguido el tanto de la victoria para los ibicencos, que este martes entrarán en el bombo de la tercera ronda, donde podría quedar emparejado con Real Madrid o FC Barcelona.

La escuadra de Pablo Alfaro se ha hecho merecedora del triunfo en el tiempo reglamentario, donde se ha mostrado superior al Albacete de Segunda División. No obstante, ha sido el equipo manchego el que se ha adelantado en el marcador a los 43 minutos por mediación de Álvaro Jiménez. En la segunda mitad el conjunto pitiuso ha acorralado a los manchegos, logrando el empate Miguel Núñez en el minuto 66. Se llegó a una prórroga que se consumió y en la que el marcador no varió. Después, en los penaltis, el bloque pitiuso logró un merecido pase.

A los 2 minutos gozó de una falta peligrosa el conjunto ibicenco que cabeceó muy desviado Rubén, quien recuperó su puesto en el centro de la zaga junto a Gonzalo. Alfaro demostró que quería la Copa y puso a su once de gala, con la principal novedad de Kike López en el extremo zurdo para mantener a Pep Caballé en su carril habitual.

Los primeros minutos fueron de claro dominio celeste. La UD Ibiza no renunció a la posesión y como es tradicional sometió a su rival, de superior categoría, en un inicio marcado por el espectacular ambiente que se vivía en las gradas. En el minuto 12 volvió a avisar el conjunto local, en un balón en largo del que se adueñó Rodado y que consiguió finalizar con un remate al lateral de la red.

Tras un primer cuarto de hora de tanteo, el equipo de Luis Ramis se estiró y aceleró el ritmo para tratar de apoderarse del control del partido. Pero fue el colectivo local el que alcanzó con peligro el área albaceteña, en una jugada de estrategia que remató muy forzado Rodado y que acabó Rubén con dos regates en el área y una falta posterior. El defensa celeste fue protagonista en la jugada siguiente, también a balón parado, pero tras ganar la línea de fondo mandó el centro a las nubes. Poco después Javi Pérez cabeceó demasiado cruzado un buen centro de Morillas, después de que Javi Lara recuperase el balón en el vértice del área. Corría la primera media hora de partido y no había noticias del 'Alba' en ataque.

En paralelo, un golpe fortuito entre Álvaro Jiménez y Morillas obligó a Alfaro a sustituir por primera vez en lo que va de temporada al lateral murciano, cuyo sitio ocupó Rubén, con Mariano Gómez en el centro de la defensa (min. 32). El zurdo tuvo que ser retirado en camilla.

El defensa argentino la pifió en su primera intervención dentro del área, pero Capezzi lanzó el balón a las nubes. A pesar de los contratiempos el Ibiza no se amilanó y volvió a percutir por los costados buscando centros al área que pudiera enganchar Rodado. El partido volvió a detenerse unos minutos después de que Javi Lara impactara un lanzamiento de falta en la cara de Álvaro Jiménez, herido por partida doble en una primera mitad en la que fue el conjunto de Alfaro el que puso el juego y las ocasiones.

El delantero albaceteño se lamió las heridas con el gol que puso por delante al Albacete al filo del descanso, al remachar junto al palo corto un despeje de Germán a disparo de Silvestre (min. 43). La zaga ibicenca no estuvo contundente para frenar al centrocampista, que se había colado por el carril central como Pedro por su casa. El combinado manchego rentabilizó al máximo su única gran ocasión en una primeras mitad donde mereció mucho más la UD Ibiza.

En el minuto 48 el colegiado anuló un gol a Pep Caballé por un fuera de juego de Kike López, que se estrelló con el portero después de que éste rechazara con una gran intervención un disparo ajustado de Javi Lara. Los celestes acariciaron el empate tras el paso por vestuarios y siguieron apretando al Alba en campo contrario, exhibiendo coraje y corazón.

Los de Ramis se estaban viendo superados, incapaces de desprenderse de la presión a la que estaban siendo sometidos. Por ambas bandas percutía el Ibiza, que volvió a rondar el 1-1 en un córner botado por Lara que no acertó a finalizar Mariano en el área pequeña (min. 61). El asedio local encontró premio a los 66 minutos, tras remachar a gol Miguel Núñez una jugada embarullada que ganó Rodado en el balcón del área con su clásico cuerpeo. Un tanto de fe y determinación que sirvió para impartir justicia en el marcador (1-1). Pocas veces un equipo había merecido tanto el empate.

El Albacete despertó de la siesta con el tanto de su exjugador -Núñez pasó ocho temporadas por el club manchego- y Castillo dispuso de una clara ocasión con un potente remate que despejó German con ambos puños.

El propio Castillo finalizó de tacón un espectacular eslalon de Álvaro Jiménez, pero Germán estuvo atento para detener el cuero abajo. La acción ofensiva del bloque manchego vino precedida por un nuevo error de los celestes en la salida de balón, algo que podía pasarle factura si no afinaba en las transiciones.

Los de Alfaro respondieron con un fútbol intenso y vertical que volvió a empujar al Alba a sus dominios. Raí protagonizó una peligrosa acción junto al lateral del área y, a continuación, Javi Lara ejecutó dos jugadas de estrategia sin mucho éxito (min. 82).

Ojeda puso la réplica con una volea mordida y sin peligro tras una larga jugada combinativa de los albacetistas, que mejoraron con la entrada de Barri en la medular. Rodado la tuvo justo después al aprovechar un error de Caro, que arregló el propio central al adivinar la finta del delantero celeste.

En el descuento pudo cerrar la eliminatoria el equipo castellano, con varios remates que acertó a repeler la zaga local, y con una falta lateral sin consecuencias.

Prórroga

La prórroga estaba servida y como en el tiempo reglamentario, llevó la iniciativa y abrió la veda de las ocasiones el conjunto ibicenco, con un córner en el que Lara a punto estuvo de conseguir el gol olímpico. La siguiente fue para Raí, pero su disparo a bote pronto tras recibir un cambio de orientación se marchó al limbo (min. 100). El brasileño también la tuvo en la reanudación, después de un potente rebote que salió directo hacia la meta del Alba, donde Brazao volvió a salvar a los suyos con una gran intervención.

A pesar del sorprendente dominio de los ibicencos, el Albacete pudo sentenciar en los instantes finales, cuando cayó lesionado Rubén, pero el choque se marchó a los penaltis sin remisión. El fallo de Olabe y el posterior acierto de Mendonza, en las penas máximas clave, prolongaron el sueño de la UD Ibiza.