La inversión en obras en el sector turístico en Baleares ha alcanzado los 250 millones de euros en los nueve primeros meses del año, con un incremento del 13,8 % respecto al año pasado; la realizada en obra privada supera los 950 millones, con un aumento del 25 % y la licitación pública crece un 7,6 % hasta 264.
La incertidumbre que generan las políticas de las administraciones públicas y sus moratorias son la principal amenaza para el sector, si bien la inercia hará que 2018 vuelva a ser un buen año, según el balance realizado por la Asociación de Constructores de Baleares, que indica que aumentan los visados de obra, la inversión y la licitación de obra pública.
Según los datos recogidos por la Asociación de Constructores de Baleares en los nueve primeros meses del año, el crecimiento de la inversión en obra privada ha sido de un 25,4 % en Mallorca, con 704 millones; en Menorca del 48 % con 85 millones; y en las Pitiusas del 14,5 %, con 162 millones.
Inversión privada
Inversión privadaEl gran motor que ha impulsado la inversión privada es la vivienda, con un aumento del 7,75 % entre enero y septiembre y 1.682 viviendas visadas.
Por islas, en Mallorca el número de viviendas visadas ha aumentado un 8,21 % y la inversión para llevarlas a cabo un 22,37 %.
Menorca ha visto como el número de viviendas visadas disminuía un 18 % mientras la inversión prevista en estas obras aumentaba un 29 %. Ibiza y Formentera son las islas que continúan creciendo a un ritmo más significativo, un 20 %, y la inversión económica asciende un 49,84 %.
Que el crecimiento de la inversión sea superior indica que se están construyendo viviendas de alto poder adquisitivo, lo que según los Constructores revela "como hay un sector de la sociedad olvidado en vivienda que es la clase media, con grandes dificultades para acceder a una".
En cuanto a las obras en el sector turístico, con un aumento del 13,8 % de la inversión en todo Baleares; en Mallorca ha habido proyectos por 195 millones, un 27 % más; en Menorca se ha duplicado con 29 millones y un 107 % más y en las Pitiusas ha descendido un 52 %.
Según la Asociación de Constructores de Baleares, si ha crecido la inversión turística "es porque todavía se contemplan los últimos proyectos de reformas hoteleras que se hicieron por las ventajas de incremento de plantas y de aumento de categoría, pero desde julio estas ayudas ya no se aplican y aunque haya otros incentivos no son lo suficientemente atractivos para que continúe el ritmo de inversión".
Entre las inversiones previstas destacan las viviendas de protección oficial, tras años sin ningún tipo de inversión, con 39 en Mallorca y 4 en Menorca. Consideran que la proyección de 500 viviendas en VPO en 3 años son pocas para paliar la necesidad de vivienda existente.
En Mallorca, las obras en los sectores industrial y comercial han acumulado inversiones por valor de 50 millones hasta septiembre, con un aumento del 50 %.
De la licitación pública, que ha subido un 7,6 % en conjunto, la inversión de la Administración central ha caído un 19,7 %, con 102 millones, y la autonómica un 35,8 % con 36 millones.
Sólo las administraciones locales (ayuntamientos y consells) han aumentado las inversiones en construcción un 105 % en comparación con los nueve primeros meses del año anterior, hasta 125 millones.
Por tipología, en edificación se han invertido 118 millones, un 43 % más; en obra civil 146 millones, un 10 % menos.
Según las previsiones, la inercia hará que 2018 todavía sea un buen año para la construcción pero la incertidumbre que genera la Administración puede ser perjudicial para el sector.
La Asociación de Constructores de Baleares manifiesta preocupación "por el hecho de no ver que haya una política clara, traducida en un plan estratégico de inversiones públicas, ni una incentivación de la inversión privada".
Advierten de que "perjudicaran mucho las moratorias en la construcción, sobre todo la suspensión de licencias del Ayuntamiento de Calvià, la moratoria del de Palma con los hoteles boutique en el centro histórico de la ciudad, y la moratoria comercial del Consell de Mallorca".
Por lo que respeta a obra turística, las reformas hoteleras se frenarán por falta de incentivos, algo que ya se aprecia con el descenso del 52 % en Ibiza y Formentera. En el mismo sector, la entidad prevé que la nueva legislación hará caer las reformas en las viviendas destinadas a alquiler turístico