Homicidio imprudente, delito contra la seguridad del tráfico, omisión del deber de socorro,omisión del deber de perseguir delitos. El inspector de Policía, jefe del Grupo de Delincuencia Internacional, y el agente del mismo grupo que el domingo por la mañana atropellaron mortalmente a una ciclista alemana en la carretera de Cap Blanc, fueron detenidos acusados de un rosario de delitos. Los policías, que habían cogido uno de los coches camuflados de la Jefatura de forma irregular, ya que no estaban de servicio, se marcharon del lugar tras el accidente, y cuando fueron interceptados dieron positivo en las pruebas de alcoholemia –en el caso del inspector, quintuplicó el máximo permitido–. El agente, que conducía en el momento del atropello, ingresó ayer en prisión, mientras su jefe quedó en libertad con cargos.

El accidente ocurrió sobre las diez y media de la mañana, en la carretera de Cap Blanc, entre las urbanizaciones de sa Torre y Maioris, en el término municipal de Llucmajor. Los dos policías, un inspector y un agente, circulaban en un coche camuflado del cuerpo que habían cogido de forma irregular, ya que estaban fuera de servicio. El vehículo, un Fiat Bravo, atropelló a una alemana de 64 años, Renate Dietrich, que circulaba en bicicleta junto a un grupo en el que también estaba su marido. El golpe lanzó a la mujer contra un árbol situado junto a la carretera, lo que le causó la muerte prácticamente en el acto.

Los policías prosiguieron su marcha, aunque los testigos del accidente habían tomado la matrícula del coche. De inmediato, en cuanto la Guardia Civil de Tráfico tuvo conocimiento de la gravedad del siniestro, difundió una orden entre sus patrullas para buscar el vehículo huido. Mientras tanto, un testigo que había seguido al coche sospechoso alertó del lugar en el que se encontraba, lo que permitió interceptarlo poco después, en las proximidades de una de las urbanizaciones de la costa de Llucmajor.

Inspector ebrio al volante

En ese momento en el coche viajaba solo un hombre de 35 años, que resultó ser inspector de Policía, el actual jefe del Grupo de Delincuencia Internacional, englobado dentro de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Brigada de Policía Judicial. Fue sometido a un control de alcoholemia, que dio un resultado de 1,20, cinco veces más del máximo permitido.

Los guardias civiles le detuvieron de inmediato, pero poco después recibieron testimonios que apuntaba a que este hombre no era quien conducía en el momento del accidente. Él mismo admitió que el conductor era un compañero suyo, al que acababa de dejar en su domicilio, en una urbanización cercana. Los guardias acudieron a la casa, identificaron al hombre, agente de Policía de 39 años, destinado también en el Grupo de Delincuencia Internacional, y le sometieron al test de alcoholemia. Dio una tasa de 0,50 y fue también detenido.

El agente, supuesto conductor en el momento del accidente, fue acusado de los delitos de homicidio imprudente, contra la seguridad del tráfico y omisión de socorro. El inspector esta acusado de conducción bajo los efectos del alcohol, omisión del deber de socorro y omisión del deber de perseguir delitos.