El proyecto de fondeo de embarcaciones recreativas a lo largo de ses Illetes de Formentera, desde la playa del Cavall d´en Borrás y es Trucadors, ya ha recibido el visto bueno del Govern y establece una capacidad máxima de 250 embarcaciones, como propuso en su día el Consell de esta isla. Esta iniciativa persigue la regulación de esta actividad en los meses de verano, cuando se registra la presencia de centenares de barcas en esta área protegida. El Consell presentó el anteproyecto al Ejecutivo balear en abril del pasado año y actualmente sigue su trámite administrativo, tal y como confirmó la consellera de Medio Ambiente, Silvia Tur.
El documento cuenta ya con los informes favorables de la dirección general de Litoral del Govern balear y del Parque Natural de ses Salines, y el próximo 4 de marzo será abordado por la comisión de la Red Natura 2000. Posteriormente, deberá pasar por la Demarcación de Costas en las islas.
El sistema de fondeo controlado contará con boyas de distintos colores según las esloras y ocupará el espejo de aguas costeras a lo largo de la playa de Cavall d´en Borrás, ses Illetes y es Trucadors, en el Parque Natural de ses Salines de Ibiza y Formentera. Las boyas se situarán a 200 metros de la costa, tal y como marca la normativa marítima, y serán fijadas en fondos arenosos para evitar el anclaje en las praderas de posidonia, que actúan en esta zona como arrecife natural y garantizan la permanencia de la arena en las playas y la calidad de las aguas de baño.
Reserva previa
La consellera insular recuerda que el proyecto contempla la creación de un sistema de reserva previa para los usuarios que se podrá realizar por Internet o llamando a un número de teléfono. Las embarcaciones tendrán un límite de estancia en cada boya que no podrá ser superior a las dos noches. Cada barco deberá pagar un canon por el fondeo y no se admitirá en esa superficie otro tipo de fondeo. La consellera señaló que como contraprestación se establecerá un sistema de recogida de residuos y de vigilancia.
La aplicación de este proyecto se retrasa desde hace años debido a las dificultades administrativas que supone su implantación, ya que en su redacción deben intervenir diferentes administraciones y organismos dependientes de Medio Ambiente.
El objetivo que persigue el Consell de Formentera con esta iniciativa es regular los múltiples usos que se dan en esta zona protegida, tanto en tierra como en mar. En el primer caso, desde hace dos años, ya se regula el estacionamiento de coches y motos para evitar aglomeraciones y garantizar el paso de vehículos de emergencia. En el caso de los fondeos la conselleria considera que su regulación es la mejor fórmula para paliar los problemas derivados de la masiva presencia de embarcaciones de recreo en plena temporada turística.
Masificación en el parque
En los meses de verano las aguas costeras de Formentera registran la presencia de centenares de embarcaciones de recreo, la mayoría de ellas procedentes de Ibiza, que llegan a colapsar las aguas litorales de ses Illetes, en pleno corazón del Parque Natural de ses Salines de Ibiza y Formentera.
